Guerrilla incinera casa de presunto miembro de Las AGC

Por: Jairo Baena Vargas.

Zozobra y miedo viven hoy los habitantes del Cerrodeburgos, jurisdicción del municipio de Simití, Bolívar; quiénes vivieron otra noche de horror, después de 25 años de la guerra irregular entre guerrillas y paramilitares; recuerdo tenebroso de ese 11 de junio de 1998, imborrable en la memoria de las víctimas del conflicto armado, donde la incursión de Popeye (Comandante de las Autodefensas Unidas del Uraba, antioqueño) al Cerrodeburgos; esa vez, dejó tres muertos, Andrés Molina, que se defendió con un rémington calibre 12 y dio de baja cinco paramilitares y los civiles fallecidos: Olga Mejía Gallardo y Hermes Villamizar.

En la noche de este 20 de marzo del presente anuario, un grupo de hombres presuntamente de la guerrilla (Sin denominación, FARC o ELN) incursionaron en el principal puerto de entrada del sur de Bolívar, donde hirieron a un hombre y buscaban a grito a sujeto, dueño de la casa que incineraron.

Una fuente extraoficial señaló a EL ORIGINAL, que la incursión guerrillera al Puerto de Veracruz, fue compuesta por 15 hombres fuertemente armados; presuntamente del Ejército de Liberación Nacional, ELN, que se desplazaron por tierra y por agua; nueve desembarcaron en motor-cano y seis llegaron en tres motos; cuando un perro con sus latidos los delató. Según la fuente, el dueño de la casa se salvó milagrosamente, al tirarse al río.

Ahora, el miedo se apoderó de los habitantes, que piden la presencia de las autoridades, de la Cruz Roja Internacional y de la Defensoría, para que los Grupos Armados Organizados, los dejen por fuera del conflicto, ya que se prevé una arremetida de celos, por parte de lao grupos armados organizados GAO.

Según los versados en política el conflicto armado entre guerrillas y paras; “Desde este momento volvió la guerra declarada al sur de Bolívar” donde se vive una tensión en la comunidad cerritana por la alteración del orden público: Ruptura de los diálogos de PAZ TOTAL del Gobierno de Gustavo Petro Urrego y los grupos de extrema derecha, Clan del Golfo y Autodefensas Gaitanistas de Colombia AGC.

La preocupación invade al alcalde de Simití, Bolívar, Orlando Gómez Solera, quien pide al gobierno Central, focalizar el territorio, para resolver y detener las muertes selectivas y las incursiones de los Grupos Armados Organizados a los poblados de Simití, en el sur del departamento de Bolívar, donde se han registrado homicidios sangrientos y ha recrudecido la violencia guerrilla-autodefensas.