Después que el Fiscal, Alberto Torres Cadena, presuntamente cambiara la versión que No hubo asonada en Simití, Bolívar, sino daño en bien ajeno, para lavar el delito de los tres días que tembló el pueblo ribereño, donde quemaron y destruyeron cuatro vehículos, saquearon la alcaldía, robaron varios negocios, los cuales quedaron grabados e identificados; además que aproximadamente 50 sujetos entraron a la vivienda del periodista, David Torres Ruiz y residencia del personero municipal de esos tiempos José de Carmen Ferez Marconi, a las 9:10 de la noche del día domingo 25 de octubre de 2015, destruyendo el portón y todo a su paso e incluso se robaron varios elementos y electrodomésticos; han pasado tres años en la impunidad y la fiscalía de Simití, se convirtió en cómplice, tapando todas las pruebas y logrando archivar o congelar el proceso, para cubrir los delitos de tres tensos días que vivió la comunidad y se logró mantener el toque de queda, para evitar que los seguidores del candidato que perdió la alcaldía, Alberto Pérez Niz, continuaran generando terror, zozobra y caos en las calles, donde se enfrentaron a la policía antidisturbios.
La alteración de orden público del domingo 26 de octubre de 2015 a las 7 de la noche, se provocó tras conocerse los resultados electorales, que dieron como ganador a Jesús Alberto Ramírez Cardona, donde la turba atacó la infraestructura de la Alcaldía y la Registraduría, dejando vidrios rotos, sino que desadaptados se llevaron algunos elementos de las instalaciones.
La camioneta que, hacia parte del esquema de seguridad del actual alcalde de Simití, Elkin Muñetón, también fue destruida por los agitadores en el garaje del comunicador, violentando la casa del periodista, Torres Ruiz, destruyendo su moto, violentando puertas de las habitaciones y saqueando electrodomésticos de su casa.
Por su parte, el candidato ganador, Jesús Alberto Ramírez, indicó a los medios de comunicación que algunos simpatizantes de su acompaña se encuentran con él en su finca, ubicada en el corregimiento de Monterrey “Estoy con las personas que me apoyaron porque andan preocupadas, dicen que les van a quemar las casas porque me apoyaron”.
Los desadaptados que protagonizan los disturbios quemaron vehículos y saquearon negocios y viviendas, dejando perdidas que ascendieron a más de ($ 1.000) mil millones de pesos, protagonizada por casi 300 personas; los hechos fueron puesta en conocimiento por las propias autoridades civiles y los afectados, quienes explicaron que cerca de las 9:00 de la noche del domingo se empezó a militarizar el pueblo para lograr controlar los disturbios de la noche negra de Simití.