Los habitantes de la vereda Bellohorizonte jurisdicción de Simití, manifestaron que el primer kilómetro de carretera que, del puerto de la Belleza, Morales, conduce al corregimiento de Las Brisas del municipio de Simití se lo tragó la corriente del río Morales y lo peor del caso, el puente inaugurado en el año de 2014 sólo quedo el esqueleto, No sirve para nada y se convirtió en una isla blanca; ejemplo de detrimento patrimonial; por no prever la altura del jarillón para evitar las inundaciones en épocas de creciente.
Los motor-canoas y chalupas tienen que dejar a los pasajeros en un punto determinado por los residentes, vía de la quebrada de Ororia que procede de las ciénagas de la Hondilla y la ciénaga de Simití, interconectado por el caño construido por el exalcalde Napoleón Barba López.
A este problema de intercomunicación, se suma el problema de varios sectores inundados por la creciente que ha dejado perdidas materiales incalculables, donde ciudadanos del campo han perdido animales de corral y cultivos de maíz, plátano y yuca, donde la creciente ha hecho estragos; este problema agudiza el panorama desolador de la ribera, que ha dejado el dengue y la pandemia de COVID-19, que cada día deja más enfermos.
Los campesinos piden al gobierno departamental y nacional, ayudas humanitarias, para poder resolver el problema que ha dejado la ola inverna; damnificados que cada invierno ven impávidos la creciente del río Simití y el río Morales, que les quita todo.