Los resultados negativos que dejó el nefasto incendio forestal en Hatillo, municipio de Rioviejo, Bolívar, NO solo puso en peligro vidas humanas, sino que arrasó con gran parte de la fauna y la flora endémica del sector y aumento la sequía en la zona, donde se han secado más 53 ciénagas, coletazo del genocidio de Hidruituango que revirtió en la cuenca hídrica del bajo y Medio Magdalena que alimenta el caudal conjunto con el río Cauca en la depresión momposina hacia la desembocadura en el ocena Atlántico.

A este infierno abrazador se le pudo detener, gracias a múltiples fuerzas que se sumaron como grupos de ayuda de la zona, comunidad, el gobierno departamento y el ejército Nacional.

Este incendio forestal de alta envergadura fue mitigado y las autoridades piden a los pirómanos y campesinos, detener las quemas que está colocando en desequilibrio y alto riesgo el ecosistema de la zona.