Desde la noche oscura, se dibuja la silueta de uno de los corregimientos más legendarios del sur de Bolívar; desde hace pocos días, así luce el pintoresco poblado de Micoahumado, jurisdicción del municipio de Morales, Bolívar.
Gracias a la instalación de lámparas luminarias led; el gobierno de Neguib Antonio Eslait Barrios, transformó el territorio; un territorio golpeado por le exclusión y la indiferencia, que buscó en el alumbrado público, un servicio público consistente en la iluminación de las vías públicas, parques públicos, y demás espacios de libre circulación que no se encuentren a cargo de ninguna persona natural o jurídica de derecho privado o público, con el objetivo de proporcionar la visibilidad adecuada para el normal desarrollo de las actividades.
Por lo general el alumbrado público de Morales y en especial de Micoahumado, es un servicio municipal que se encarga de su instalación y mantenimiento, aunque en carreteras o infraestructuras viales importantes corresponde esta tarea del gobierno central o regional. La mayoría de los alumbrados públicos del municipio de Morales, son de lámparas LED, que le dieron otro panorama a los pueblos, que nunca en la historia, habían tenido la oportunidad de tener alumbradas sus viejas calles.
Las historias del pasado, narradas por las viejas abuelas, que detrás de un fogón narraban historias fantasmagóricas que engrifaban a los chiquillos antes de dormir; esos que detenidamente escuchaban cuentos del ayer, dejan un destello de alegría en los niños, sobre todo, aquellos que tienen la oportunidad de recorrer en la noche, la calle, su parque, antes que sus ojos se empijamen, para poder disfrutar de la noche de luz, dada por el gobierno de Morales, Bolívar, que para muchos era solo un sueño.