Por: Jairo Baena Vargas.

Después de 8 días sin el servicio de Agua potable, la comunidad del municipio de Morales, Bolívar, confinada en la emergencia sanitaria de la pandemia del COVID-19, comienza a recibir por sector el servicio público, fundamental para la sobrevivencia del pueblo.

Este elemento vital para la vida, cada día es peor en el municipio rivereño; se dañaron las bombas, se reventaron las tuberías y lo peor del caso es que esta pignorado por muchos años; pareciera que es un problema eterno, donde ningún mandatario se amarra los pantalones y se ha convertido en la caja menor del gasto; donde piensan que aún se puede beber agua cruda del río Morales.

Santa Rosa del sur cuenta con un pésimo y costoso servicio; es superado por Morales, que es el único municipio en el sur de Bolívar, que aún cuenta con un acueducto de la era de los dinosaurios, con un tanque de hierro, donde hacen el proceso de tratamiento.

Según el burgomaestre, Eslait Barrios, le apunta, que Agua de Bolívar u otra Institución del Estado, construya una buena planta de tratamiento donde dignamente los moraleros puedan servirse de un buen acueducto.