Habilitado la vía Piedracandela, el tramo que se rompió por la fuerza de la corriente del río Simití, en la ola invernal de mayo del 2025, en el boquete que se derrumbó en la noche del 10 de mayo del presente anuario, en el sector de los afranios; finca de doña Gloria Payares y Agustín Carrasquilla. Ahí se anegó las pozas, humedales y pantanos del corregimiento de Piedracandela y hizo crecer vertiginosamente el pantano gigante del municipio de Simití, Bolívar; la alcaldía de Simití, Bolívar, anunció el arreglo, donde se utilizaron rocas para detener el agua que afecta la ciénaga de Simití y que la comunidad depende en 98 porciento.
Un líder de Simití manifestó: “Es necesario antes que se pavimente la carretera Morales-Simití, arreglar definitivamente y dar solución al problema que afecta el espejo de agua, ya que el agua contaminada y revuelta con lodo no solo aterra la ciénaga, sino que puede colocar en riesgo la vida silvestre del humedal.
Es necesario que se reúna el contratista de la obra, Juan David Mendiola, el burgomaestre, Wilman Quintana y la Comunidad de Piedracandela, para que puedan discutir sobre una muralla, a la altura necesaria y con la base rocosa que soporten y repelen la fuerza de la creciente del río y este siga su curso natural; a través de los recursos de PDET se logren recurso para cofinanciar la obra que requieren más los habitantes de Simití, para proteger la ciénaga, por encima de la pavimentación, sin menospreciar el valor que ella tiene”.